1 de marzo de 2010

Sobre el lenguaje...

En repetidas ocasiones he tenido la oportunidad de discutir con quienes me rodean acerca de la sinsalida del lenguaje. Tratar de explicar el mundo desde registros diferentes al lenguaje es un imposible, es una serpiente mordiéndose la cola, es un círculo bastante vicioso e insalvable. Este fin de semana me topé con un poema que me recordó el sinsabor de la sinsalida, un poema que a continuación cito para dar cuenta de maneras tangenciales de acercarse lo más posible al agujero oscuro del silencio, de la no palabra, como diría Calvino del mundo NO escrito que no puede llegar a serlo.

8

Dibujaba ventanas en todas partes.
En los muros demasiado altos,
en los muros demasiado bajos,
en las paredes obtusas, en los rincones,
en el aire y hasta en los techos.

Dibujaba ventanas como si dibujara pájaros.
En el piso, en las noches,
en las miradas palpablemente sordas,
en los alrededores de la muerte,
en las tumbas, los árboles.

Dibujaba ventanas hasta en las puertas.
Pero nunca dibujó una puerta.
No quería entrar ni salir.
Sabía que no se puede.
Solamente quería ver: ver.

Dibujaba ventanas.
En todas partes.

Roberto Juarroz

La escritura se constituye en los arañazos de un preso del lenguaje que intenta con la punta de sus dedos desbaratar los muros que desde su primer gesto en la primera infancia, lo encerró entre las palabras. Con la escritura se intenta ar, er e ir... Lo dice Tomás Rodríguez en su blog (http://tropicodelamancha.blogspot.com/2010/02/gato-lluvia-paris.html) "el escritor ama tanto la escritura porque en ella siente la voluntad de libertad que no conoce en el mundo".

¿Golpes y golpes a las paredes o dibujamos ventanas?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Porque siempre se tendrá algo por decir... no?